Quien dijo que hacer un desayuno rico es difícil???. Queréis sorprender a unos invitados, con los que ya contáis claro, con una merienda rica, rica Estos bizcochos que deben servirse recién hechos harán las delicias de los mas golosos. Con una dulce sorpresa en su interior que nadie se espera.
La verdad que antes de leer la receta ya me gustó, pero no sabía como podía introducir el toffee en su interior. Y según iba leyendo me sorprendió muchísimo la manera de hacerlo. Digamos que se rellena el bizcocho con un bito de helado de toffee.
Sería un postre muy parecido al coulant. Yo tuve un percance y el interior rno me quedo como debiera y es que me pasé un poquito en el punto de cocción. Añadido a que el toffee no había quedado del todo espeso lo que hice que no quedara líquido en el interior.
También se podría hacer de otra manera quizás para servir en el momento mucho mas practica y es una vez hechos los bizcochos rellenarlos con la ayuda de una manga pastelera. Cada uno que elija la versión que mas le guste.
Ingredientes:
220 gr de azúcar
150 gr de mantequilla
140 gr de harina
3 huevos
10 gr de levadura
150 ml de nata para montar
3 gotitas de esencia de vainilla
- Disolvemos en 2 cucharadas de agua 60gr de azúcar y cocemos de 4 a 5 minutos hasta que obtengamos un caramelo dorado.
- Incorporamos entonces la nata un poco templada, removemos y vertemos la mezcla en una bandeja de cubitos de hielo.
- Dejamos en el congelador durante 2 horas o mas.
- Batimos la mantequilla ablandada con 140 gr de azúcar hasta que esté cremosa.
- Añadimos los huevos de uno en uno sin dejar de batir y, luego, la harina tamizada con la levadura.
- Removemos hasta lograr hasta lograr una masa homogénea.
- Agregamos la vainilla y mezclamos.
- Repartimos la masa en moldecillos de silicona y los llenamos solo hasta la mitad.
- Ponemos 1 cubito de toffee y acabamos de rellenarlos hasta sus tres cuartas partes.
- Horneamos 20 minutos con el horno precalentado a 180º.